SCHUBERT, FRANZ (1797-1826)
Sinfonía nro. 8 “Inconclusa” (1822)
- Allegro moderato
- Andante con Moto
SCHUBERT, FRANZ (1797-1826) – BERIO, LUCIANO (1925-2003)
Rendering. (1988-90)
- Allegro
- Andante
- Allegro
NOTAS AL PROGRAMA
En 1822 Schubert comenzó su sinfonía en si menor pero luego de dos movimientos y el bosquejo de un tercero lo abandonó. Hay varias teorías sobre sus motivos para dejarla incompleta: la posibilidad de que parte del manuscrito se perdiera, qué usara el cuarto movimiento para otra pieza, o la explicación más verosímil para la crítica, que él mismo se cuestionara la capacidad de componer dos movimientos más con la misma altura y calidad que los primeros, por lo que la obra quedó de esa manera, un díptico asimétrico pero equilibrado. Su octava sinfonía es conocida como “Inconclusa” y fue estrenada 40 años luego de su composición.
Pero no fue la única obra incompleta de Schubert, luego de escribir su novena sinfonía “La Grande” empieza a hacer los bocetos de una décima, sin embargo, falleció antes de terminarla y sólo dejo unos bosquejos escritos para piano, sin orquestar. Luciano Berio compuso la obra “Rendering” a partir de estos bocetos. Él no pretendía ser Schubert para completar la sinfonía como si este lo hubiera hecho, sino que dejó los fragmentos originales y solo agregó unas conexiones sonoras que separan y al mismo tiempo mantienen junta la idea original. Berio, tomó la conformación orquestal que tiene la sinfonía inconclusa y orquestó los temas musicales tratando de salvaguardar el color característico de Schubert, aunque inspirado también en Mendelssohn y en Mahler, cómo se puede apreciar rápidamente en el espíritu del segundo movimiento. Sobre sus intervenciones compositivas Berio expresó: “he escrito una especie de tejido constantemente diferenciado y cambiante, siempre pianísimo y distante, entremezclado con reminiscencias de otras obras de Schubert y cruzado con texturas polifónicas basadas en los mismos bosquejos. Este delicado cemento musical que conecta un boceto y otro es anunciado siempre por el sonido de la celesta. Berio describe su propia obra como un paseo por un bosque vienés caminando y conversando con el propio Franz Schubert.
